Hablamos con Carlo Cappuzzello, director del proyecto LIFE Marbled Duck PSSO que se desarrolla en Italia para recuperar la población reproductora de cerceta pardilla y de otras especies, en el complejo de humedales del sureste de Sicilia. Este es uno de los humedales costeros más importantes que quedan en el sur de Europa. Está incluido en la Red Natura 2000 como LIC y ZEPA, y alberga a las escasísimas parejas reproductoras de cerceta pardilla de todo el país vecino.
El proyecto se encuentra en su recta final después de haber llevado a cabo distintas acciones de conservación y gestión a lo largo de los últimos cuatro años, entre ellas, la liberación de ejemplares criados en cautividad, procedentes del centro de cría “La Granja del Saler” de la Comunidad Valenciana, en colaboración con el proyecto LIFE Cerceta Pardilla.
El intercambio de conocimientos y experiencias entre ambos proyectos LIFE es muy importante pues contribuye a potenciar mutuamente el éxito de resultados y avanzar en el objetivo común de recuperar a una especie tan amenazada en Europa.
1. – ¿Cuál es el balance que puede hacer del trabajo realizado en el proyecto que llevan a cabo en esta importante área de humedales de Sicilia? ¿Se ha conseguido aumentar la población de cerceta pardilla, que es el principal objetivo?
Los resultados obtenidos hasta el momento son muy buenos. Antes del inicio del proyecto, las parejas de cerceta pardilla que se reproducían en toda el área de los humedales del Pantani della Sicilia Sud Orientale eran dos o como máximo tres. En 2023 se han censado en la misma área 11 parejas.
Aunque teníamos confianza, no esperábamos tanto éxito, sobre todo considerando que, debido al COVID-19, las acciones del proyecto, especialmente aquellas para la mejora del hábitat, comenzaron con más de un año y medio de retraso. También el éxito reproductivo ha aumentado de manera constante, con el nacimiento en 2023 de 43 pollos.
Seguimos trabajando para mejorar aún más los resultados con el objetivo de alcanzar una media de más de 15 parejas reproductoras sólo en los humedales del sureste de Sicilia, además de las que podrían establecerse en otros humedales de la isla, como ya sugieren los datos de presencia de cercetas pardillas observadas. Las otras especies objetivo del proyecto también han mostrado resultados muy positivos, en particular la población reproductora de porrón pardo, que pasó de una media de 20-25 parejas antes del proyecto a 51 en 2023.
2. Una parte importante de las acciones de su proyecto se ha dirigido a la mejora del hábitat de la cerceta pardilla y de otras especies que lo comparten con ella. Esta es también una de las líneas clave que desarrollamos en España. ¿Cuáles han sido las acciones fundamentales para conseguirlo y las que han obtenido mejores resultados?
Las dos acciones que mayor impacto han tenido en el crecimiento de la población nidificante de la cerceta pardilla han sido la creación de nichos adecuados para la nidificación de la especie y el reforzamiento mediante la liberación de ejemplares procedentes del centro de cría La Granja del Saler.
Esta conclusión se apoya, en nuestra opinión, en dos circunstancias que detectamos durante el seguimiento de las temporadas de cría de 2022 y 2023. La primera es que todos los nichos que restauramos o creamos fueron inmediatamente ocupados en la primera temporada de cría por parejas de cerceta pardilla que se han reproducido con éxito.
La segunda circunstancia es que a partir de 2022, los ejemplares liberados al final del invierno se han reproducido regularmente ya en la siguiente primavera y lo han hecho en gran número. Y lo que es más importante, la presencia de la especie en invierno se ha vuelto regular.
Por tanto, la liberación de los ejemplares del centro de cría La Granja del Saler ha jugado un papel muy importante para aprovechar lo más rápidamente posible los nuevos nichos ecológicos aptos para la nidificación, cuya escasez antes del proyecto era, de hecho, uno de los factores limitantes del crecimiento de su población.
3.- Esta era justo la siguiente pregunta ¿Qué tal se han adaptado los animales liberados a los humedales costeros sicilianos en los que trabajáis?
Las evidencias recogidas hasta la fecha nos permiten afirmar que la adaptación ha sido rápida y, diría, completa. Después de la primera suelta en 2021, en un momento aún fuertemente afectado por la pandemia de COVID-19, reajustamos y realizamos dos sueltas en 2022 con un total de 40 ejemplares. Casi todos ellos, más algunos liberados en 2021, formaron parejas durante la temporada reproductiva de 2022 y lo mismo se repitió en 2023, con los resultados ya mencionados anteriormente en términos de parejas reproductoras totales.
Además, como también se ha comentado, la presencia de la especie en invierno se ha vuelto habitual en el humedal donde se desarrolla el proyecto, con un número de individuos presentes muy superior al registrado antes del proyecto. En los dos últimos inviernos también se han producido una serie de avistamientos de ejemplares invernando en otras zonas húmedas de Sicilia y del sur de Italia.
4.- El proyecto también ha dado mucha importancia a la sensibilización ciudadana, y además de los materiales informativos, se han creado dotaciones como un carril bici y peatonal para fomentar el conocimiento directo del complejo de humedales y su riqueza natural. ¿Qué tal está funcionando esta iniciativa?
La creación del carril bici y peatonal ha sido una de las experiencias más interesantes del proyecto en el ámbito de la sensibilización. No sólo ha transformado en un hermoso paseo por el borde del humedal lo que era una carretera secundaria que a menudo se utilizaba para verter residuos ilegalmente, sino que también ha permitido al equipo del proyecto fortalecer las relaciones con las explotaciones agrícolas localizadas en las inmediaciones del humedal , así como con los administración local.
La ruta ha sido equipada con carteles informativos sobre el proyecto LIFE y sobre la flora y fauna local, y desde su inauguración, en agosto de 2023, ha sido cada vez más frecuentada por muchas personas, familias y aficionados que disfrutan de un hermoso paseo en la naturaleza con la posibilidad de observar muchas especies de aves, incluida la muy rara cerceta pardilla cuya existencia ni siquiera sabían que existía antes.
5.- Los humedales costeros del sureste de Sicilia se encuentran en una zona en la que conviven muchos usos y actividades humanas; agricultura, caza, turismo… ¿Cómo se ha integrado la participación de estos sectores y de las administraciones en el proyecto? ¿Qué destacaría de su implicación?
Como suele ocurrir en estos casos, una coexistencia constructiva entre las actividades humanas y la conservación de la naturaleza requiere el compromiso de todos y desde el principio pensamos en el proyecto LIFE como una chispa que podría encender la motivación hacia este compromiso, especialmente en las dos categorías de actores que tienen mayor impacto en la realidad de nuestro humedal: las empresas y las administraciones agrícolas.
A pesar de las dificultades y resistencias previsibles, gracias a las actividades de implicación previstas en el proyecto, especialmente para los agricultores, conseguimos crear en primer lugar un canal de comunicación y posteriormente también varios espacios de debate que nos permitieron transmitir a un buen número de agricultores el mensaje de que los humedales y la conservación de la naturaleza también pueden representar un recurso para ellos.
En particular, una de las empresas agrícolas que opera en las inmediaciones del Pantano Longarini ha decidido emprender una serie de acciones en favor de la biodiversidad y prevé pasar gran parte de sus cultivos a la agricultura ecológica en los próximos años. Además, en la creación del carril para peatones y bicicletas se contó con la implicación total y constructiva también de numerosos agricultores y de la administración local.
Junto a todos estos actores trabajamos en armonía para lograr un objetivo que se ha vuelto común.
6.- Valorando todos los elementos que han encontrado en la ejecución del proyecto, tanto los logros como las dificultades, ¿cuál es la principal enseñanza con la que se quedaría y de la que todos podemos aprender?
La principal lección que puedo extraer de la experiencia de este proyecto LIFE es el papel fundamental de la colaboración. Afrontar desafíos en el campo de la conservación de la naturaleza y la salvaguarda de especies en peligro de extinción requiere el uso de una gama tan amplia de habilidades y profesionalidad que sólo se pueden obtener resultados positivos si la mayoría de los posibles actores están involucrados y se encuentra la mejor manera de trabajar en sinergia, combinando las diferentes habilidades de forma correcta para lograr el objetivo.
Nunca hubiéramos pensado al inicio del proyecto que nos encontraríamos colaborando con tantos actores diferentes, y que cada uno de ellos tendría un papel fundamental en el panorama general del proyecto.
Los desafíos que plantea la conservación de especies amenazadas, como la cerceta pardilla, y en particular la necesidad de actuar en múltiples niveles para intentar revertir las tendencias negativas, son ciertamente muy exigentes y no siempre con un resultado predecible, a pesar de la disponibilidad de recursos financieros y conocimientos científicos adecuados. Sin embargo, las posibilidades de éxito aumentan exponencialmente si es posible identificar e involucrar activa y constructivamente a todos los sujetos que tienen las habilidades o prerrogativas para contribuir, aunque sea en diferentes niveles, al resultado final.