España cuenta con una nueva Estrategia para la conservación de la cerceta pardilla, focha moruna, malvasía cabeciblanca y porrón pardo, aprobada por la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente. La nueva estrategia actualiza la anterior, aprobada en 2013, e incorpora una nueva especie, el porrón pardo. Las cuatro aves acuáticas, todas ellas de importancia europea, se han considerado conjuntamente por sus similitudes en cuanto a estado de conservación, amenazas y requerimientos ecológicos.
El objetivo principal de esta estrategia es revertir el nivel de amenaza de estas aves acuáticas, para lo que se ha realizado una identificación de los factores limitantes, así como un diagnóstico de su estado de conservación. Se han tenido en cuenta los datos de los censos y de las actuaciones realizadas desde el año 2012 al 2022. Además, la estrategia identifica como Lugares Críticos aquellos humedales con presencia regular de estas aves y en los que se reproducen en la actualidad o lo hayan hecho en los últimos diez años, y también identifica las áreas que podrían colonizar potencialmente, a las que denomina Lugares de Expansión. Los objetivos y las acciones de la estrategia se aplican en todas ellas.
ACCIONES PARA MINIMIZAR AMENAZAS
El documento señala que son diversas las amenazas que inciden negativamente sobre las cuatro especies y sus hábitats. En concreto, destaca la pérdida y degradación de los humedales; la caza accidental y el furtivismo; el impacto de la depredación, que llevan a cabo diferentes especies generalistas cuyas poblaciones se ven favorecidas por actividades humanas, como los gatos asilvestrados, los brotes epidemiológicos o el efecto negativo de algunas especies exóticas invasoras.
Para minimizar estas afecciones y tratar de mejorar el estado de conservación de la cerceta pardilla, la focha moruna, la malvasía cabeciblanca y el porrón pardo, la estrategia considera líneas de actuación que incluyen el reforzamiento de la protección legal de las cuatro especies y de su hábitat; el fomento de la gestión de los humedales, incluyendo el aumento de la calidad y disponibilidad de los recursos hídricos y su restauración; así como la eliminación o minimización de las causas de mortalidad no natural, como la caza accidental y el furtivismo o prácticas piscícolas inadecuadas, entre otras.
ACCIONES PARA EL IMPULSO DE LA CONSERVACIÓN
Además, también se contemplan acciones para el impulso de la conservación ex situ, especialmente en el caso de la focha moruna y la cerceta pardilla; el fomento de la investigación aplicada; el apoyo a la difusión, comunicación y sensibilización de la propia estrategia y de la conservación de estas especies y sus hábitats; así como la mejora de la coordinación nacional y el fomento de la cooperación internacional en esta materia.
OBJETIVOS CUANTIFICABLES
Una novedad destacada de la nueva estrategia es el establecimiento de objetivos cuantificables con metas temporales. En concreto, el objetivo estratégico principal establece que en 2040 la focha moruna y la malvasía cabeciblanca dejen de estar incluidas en el Catálogo Español de Especies Amenazadas como “En peligro de extinción”, y la cerceta pardilla como “En situación crítica”. Además, para la cerceta pardilla, se define también como objetivo estratégico que en 2035 críen un mínimo de 125 parejas en España, sin fluctuaciones extremas por causas no naturales, durante un periodo continuado de, al menos, 10 años. No se incluyen objetivos concretos para el porrón pardo puesto que se plantea que las prioridades y actuaciones propuestas para la conservación de las otras tres especies le beneficiarán de manera suficiente.
Para lograr estas metas estratégicas, se establecen a su vez ocho objetivos generales y 44 específicos comunes para las cuatro especies o centrados en alguna de ellas.
El órgano técnico de coordinación entre administraciones sigue siendo el Grupo de Trabajo destinado a las especies objetivo de la estrategia, dependiente del Comité de Flora y Fauna Silvestres.
APOYO DEL LIFE CERCETA PARDILLA
La elaboración de la estrategia ha contado con el apoyo del proyecto LIFE Cerceta Pardilla, que coordina la Fundación Biodiversidad del MITECO hasta 2025. Esta iniciativa persigue el objetivo de mejorar el estado de conservación de 3.000 hectáreas de humedales para revertir el riesgo de extinción del pato más amenazado de Europa. Por ello, desarrolla un conjunto de acciones de investigación, conservación, gobernanza y sensibilización para reforzar el estado de sus poblaciones en el medio natural, mejorar el estado de los humedales y el conocimiento científico de la especie.
En el proyecto participan como socios el propio ministerio, a través de la Confederación Hidrográfica del Segura y Tragsatec; la Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente y la Agencia de Medio Ambiente y Agua; la Generalitat Valenciana, a través de la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio; la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, a través de la Consejería de Medio Ambiente, Mar Menor, Universidades e Investigación, así como las organizaciones Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife) y la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE). Cuenta con la contribución del Programa LIFE de la Unión Europea y de la Dirección General del Agua.
