Con el objetivo de mejorar el conocimiento de la especie, se ha realizado el estudio “Evaluación de la variabilidad y estructura genética de las poblaciones cautivas y silvestres de cerceta pardilla”. Además de informar sobre la salud genética de la población española, los resultados obtenidos servirán para guiar la ejecución del programa de conservación ex situ para reforzar la población con ejemplares procedentes de la cría en cautividad.
Este estudio, elaborado por la Estación Biológica de Doñana en el marco del proyecto LIFE Cerceta Pardilla, pretende dar respuesta a cuestiones como si hay diferencia entre las distintas poblaciones biogeográficas, cómo es la diversidad genética de las poblaciones cautivas y cuánto se aleja de la de las poblaciones silvestres o si ha habido mezcla entre poblaciones cautivas de diferentes orígenes.
Para ello, se ha analizado el material genético de diferentes poblaciones de cerceta pardilla de España e Irak, tanto silvestres como cautivas, siguiendo dos metodologías de análisis de ADN y ARN mitocondrial.
PRINCIPALES CONCLUSIONES
De los resultados del estudio se han extraído una serie de conclusiones principales, así como recomendaciones de gestión asociadas.
En primer lugar, se evidencia una clara diferencia entre las poblaciones geográficas de España e Irak, por lo que se recomienda considerar estas poblaciones como unidades de gestión diferentes, evitando la mezcla de aves de los dos orígenes en los centros de cría en cautividad.
En relación con la salud de las poblaciones, hay ciertas evidencias de cuello de botella genético en la población silvestre española que, en comparación con la de Irak, presenta una menor diversidad genética y una disminución de la variabilidad genética, síntomas de una población en declive poblacional.
Por último, se identifica la población cautiva de El Saler como la mejor opción para los programas de liberación en España.
EL PROYECTO LIFE CERCETA PARDILLA
El LIFE Cerceta Pardilla tiene el objetivo de mejorar el estado de conservación de 3.000 hectáreas de humedales para revertir el riesgo de extinción del pato más amenazado de Europa, en situación crítica en España. Por ello, ha emprendido un conjunto de acciones para reforzar el estado de sus poblaciones en el medio natural, mejorar el estado de los humedales y el conocimiento científico de la especie.
En el proyecto participan como socios el propio Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la Confederación Hidrográfica del Segura y Tragsatec; la Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul y la Agencia de Medio Ambiente y Agua; la Generalitat Valenciana; la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, a través de la Consejería de Medio Ambiente, Mar Menor, Universidades e Investigación, así como las organizaciones SEO/BirdLife y ANSE. Cuenta con la contribución del Programa LIFE de la Unión Europea y de la Dirección General del Agua.